Santa Maria del Silenzio

Santa María del Silencio

Casa de soledad

En 1996, en el Paesetto della Madonna (Pequeño pueblo de la Virgen), a las puertas de Roma, en Ponte Galeria, se completó la renovación de algunos de los antiguos establos  no utilizados; tres hermanas comenzaron a crear una comunidad de vida contemplativa, dedicada a "Santa María del Silencio" .

Los ambientes que hoy constituyen la casa de huéspedes acogieron a las hermanas durante los tres primeros años de vida ad experimentum.

Mientras tanto se reorganizó la casa adyacente (que ahora acoge a la comunidad), la realización de una capilla dedicada a María Reina de Todos los Santos, fue inaugurada en 2004 por su Ecc.za Mons. Gino Reali, obispo de la diócesis de Porto y Santa Rufina.

La comunidad vive de la sabiduría monástica, presente durante siglos en la Iglesia y desea resaltar el aspecto contemplativo del carisma de las Hijas de la Iglesia.

Siguiendo los pasos de la Fundadora, “recorremos, en comunión con toda la familia religiosa y todo el pueblo de Dios, que peregrina hacia el Reino, los caminos que conducen hacia El y en particular el deseo de silencio y soledad que el mismo Espíritu ha puesto en el corazón de la Madre Oliva" ( Estatutos, 9).

La comunidad funda su vida diaria en la Palabra de Dios y en la Eucaristía.

En el espíritu de las Constituciones de las Hijas de la Iglesia, compartimos nuestro carisma con los laicos que se sienten atraídos por el espíritu del Instituto, contribuyendo al crecimiento de su camino espiritual y orientándolos a ser contemplativos en la acción.

La comunidad es sensible al diálogo ecuménico en el espíritu del unum sint que caracteriza a nuestra familia religiosa. Lo expresa en la oración litúrgica, enriquecida por textos y oraciones ecuménicas, y mantiene relaciones sencillas y fraternales con otras confesiones cristianas y con miembros de otras religiones.