Virgo Potens

Virgen Poderosa

Los años de vida de la Comunidad de Virgo Potens se pueden caracterizar de la siguiente manera:

• un comienzo lleno de sorpresas y coraje;
• un camino hacia nuevas formas de evangelización
• un cambio radical para satisfacer nuevas necesidades

Estos son los principales eventos en el desarrollo de los años:

En la noche del 21 de noviembre de 1954, la Fiesta de la Presentación de María al templo, las Hijas de la Iglesia cruzan el umbral de la casa dedicada a la Virgen bajo el título de "Virgo Potens"; hogar que durante unos veinte años fue el centro de difusión de la buena prensa en las familias. El Cardenal Schuster había solicitado a la Madre M. Oliva Bonaldo a abrir una segunda comunidad en Milán con espacios más adecuados para acoger a muchas jóvenes que; atraídas por la belleza del Carisma, se comprometian a testimoniar con alegría la belleza del Evangelio por los caminos de la vida.

 1954-1974. "Dar a conocer y amar a la Iglesia":esta expresión típica del Carisma comprometió a las Hermanas jóvenes a llevar la Palabra de vida a las familias, a dar a conocer las enseñanzas de la Madre Iglesia a través de sus documentos; algunos textos de autores de reconocido prestigio ayudaron a internalizar y traducir en opciones de vida la Palabra del Señor y del Magisterio. El encuentro, hecho casa por casa, de persona a persona, resultó ser una gran oportunidad para llegar a muchos corazones.

Algunas hermanas continuaron visitando a personas enfermas y ancianas en la comunidad parroquial de Santa Maria Beltrade. De 1957 a 1965 la casa también acogió la "Escuela Apostólica", frecuentada por chicas preadolescentes que miraban con cariño a la Vida Religiosa. Más tarde (1975) la casa se convirtió en un centro de formación y estudio para las jóvenes religiosas de diversas nacionalidades. Las nuevas necesidades de la parroquia desde 1980 involucraron a algunas hermanas en la animación litúrgica, en la catequesis y con la presencia entre los niños en el oratorio.

Con un grupo de personas atraídas por el Carisma, nace la fraternidad de los "Hijos de la Iglesia", que de diversas maneras flanquean a la comunidad.

Desde 1997 hasta la actualidad.

La comunidad, atenta a las necesidades de la Iglesia local, en la persona del Cardenal Martini, vuelve a cambiar su rostro y para responder de  manera más adecuada, el edificio también se renueva.

Durante algunos años, algunas jóvenes universitarias son acogidas, deseando pasar su tiempo en un ambiente familiar y sereno. Pero pronto surge una necesidad nueva y urgente: el drama de la enfermedad ve a un número considerable de personas llegar a los hospitales de Milán, las más diversas por origen, edad, cultura y necesidades.

Y así surge el ARCA, una estructura pequeña pero significativa, para acoger a algunos de nuestros hermanos que, probados por la enfermedad y las múltiples consecuencias asociadas a ella, buscan un lugar de acogida fraternal que pueda aliviar los inconvenientes de la distancia de la familia y donde encontrar escucha, apoyo, consuelo y una Palabra que infunde esperanza!

También las hermanas están presentes en la Comunidad Pastoral “Santa Maria Beltrade-San Gabriel” a través de la animación litúrgica y otros servicios.

Las necesidades cambian, pero el corazón humano siempre está en busca del amor, del  verdadero significado que debe darse a la existencia, especialmente en los momentos más oscuros. Con nuestra presencia, simple y pobre, nos gustaría poder contarles a todos, en palabras de nuestra Fundadora: ""¡DIOS EXISTE Y ES TODO AMOR!"